Esta vez no hubo vasos rotos, espejos hechos pedazo con un celular, ni camas revueltas, no vi las maletas en la puerta que indicaban que te ibas o ver llorando al niño, no hubo gritos, ni golpes, no mas llanto.
Solo había una nota en la mesita al lado de la cama, me dabas una extensa explicación porque no querías estar a mi lado que no era la persona indicada para criar a nuestros hijos y que te ibas porque ya no me aguatabas mis malos ratos, que mi depresión era una enfermedad que tu ya no podías soportar; que me querías pero el amor se había acabado y estabas arto de mi incoherencia, que siempre se trataba de mí. Que ya no era como antes.
Saber que estas pero no estás, no saber nada de mi cría, ver la cama vacía cuando llego del trabajo y no sentir tu calor a mi lado, el no sentir tu manos a mi alrededor, el inhalar y exhalar de tus pulmones, que no haya un beso de buenos días o una llamada al medio día para saber cómo estás y después colgarte para que vuelvas a marcar. Comer, Caminar, Dormir, vivir contigo, tus extensas charlas después del sexo y tu versión antigua de ti.
Tal vez estas sean unas o muchas de las cosas que me harán extrañarte ahora que te vas, tal vez te busque de nuevo y te pida perdón, te diga que soy diferente y que quiero estar contigo que tu eres la persona que me hace feliz que me daba paz y buena compañía, tal vez me vaya lejos y no te busque y encuentre a alguien que soporte mis desplantes depresivos y sepa cómo ayudarme. Tal vez me quite la vida y deje de incomodar.Pero nada de eso pasara.
Algún día espero saber que hacer y que eso que hicimos sea lo mejor que nos pudo haber pasado.
Solo cuídate y procura enviarme fotos de mi bebe.
Hasta Siempre;
El escritor