Magia, bailara frente tus ojos.

Flowers in the water, Till the day I die.



I feel I wanna hold you, wanna tell you that you'll be alright
Sang this song today, it's recalling your pictures all in my mind

Reflexiones de una mente traviesa

Nos llaman locos por tener algo que decir, nos llamas locas por querer lucir la vida que habita en nosotras, porque no llamar a la locura importante, nos llaman locos por tener una idea que gritar, por usar colores brillantes, por ser diferentes, nos llaman locos por amar demasiado, no llaman locos por no tener nombre, nos llaman locos por querer crear un universo en el que queramos vivir, nos llaman locos por temerle a la muerte, nos llaman locos por degustar del color de la sangre y mas al verla correr sobre la suave piel de aquel que te excita.

Nos culpan de locos a quienes necesitamos de una victoria, a quienes cada 5 minutos nos perdemos en un mundo quemándonos de azul, donde habita la luz y los sonidos nos hacen doler la cabeza, nos llaman locos porque hablamos de mas, porque no llaman loco a quien la locura no los habita, nos hace tener algo de qué hablar, algo de que escribir, tener algo en que pensar, nos afecta que no estés loco.

Que seria del mundo sin la locura, sin ella no habría a quien criticar, a quien voltear a mirar no abría a quien hacerle debate. A quien pedirle la libertad. Somos la locura sobresaliente al ras de la piel con cobertura de paz.

Hay de la locura en todos, somos presa de los mundos repletos de la ingenuidad de un millón capsulas en dosis de pasión.

Vivimos en una locura comunitaria, todos estamos locos únete a la revolución tengamos algo por que luchar, vivamos en el mundo azul y quememos nuestros ojos con el brillo del sol; así podremos ver locura que se aloja.


Puedes esperar estaremos pronto por ahí.
Sobredosis de amapolas.

Aun te sigo extrañando...

Lóbulo de los sueños.

Lentitud, plenitud, astucia, cobarde discreción contribución a las expectativas y necesidad de cambio, convirtiendo las risas en fuego, miradas, besos y caricias bajo esas llamas, bajo el ocaso suelen ser las más recordadas y apreciadas, no queman, pude que ardan pero no lastimar.

Ilumina tu camino, irradia vida, incinera la malicia y goza de la magia que yace en los charcos de la pulcritud, refleja los sentidos y aclara las ideas que nadan en ti.
Juzgar, creer, ignorar, la ambigüedad de las cosas hace que viva en la terrenal mente de dos sentimientos que se llaman sin saber, cuándo se busca y buscó, cuando encuentres. Intenta.

Benevolencia, piedad, compasión, dulzura, en busca de humildad, paz interior y explosiones multicolor.

Concentración, reflexión y la unión de espíritu, esencia, alma y cuerpo, formando vida y conmociones, huellas y la eternidad de un mundo superior regido por la claridad mundana.

Esta es una noche en la que no llorare, la sal que recorre mis ojos a cada instante en que se maquillan estropeando a eso que llamamos llorar, cada incesante sabor a cereza que tu boca me dio, está decidida a tomar un aspecto en la que mi unidad se volvía secundaria.

Hasta pronto

Te extraño!

Locura, Pánico. Entre muchas cosas más.

Fue como si estuviera soñando, caminando hacia la tranquilidad buscando un lugar de descanso después de varios días de caminar, los sonidos se hacían al tiempo pocos, el silencio se acercaba cada vez más y mi mirada se hacía pronto nublada, el pasto se acercaba era tan verde, lo demás se invertía, regresaba aquel ardor en los pies, inestabilidad, el dolor me invade. Solo un sueño más.

Son como las 4:50 a.m., despierto deprisa, cansada, los ojos intentan enfocar pero solo el sentido del oído suele funcionar, puedo sentir punzadas en el abdomen. Se comienzan a oír como la cuidad despierta, autos se encienden, algunos viajan a alta velocidad, el abdomen no deja de doler, me siento al pie de la cama, nada mas esta cerca, estoy segada de la oscuridad, tus manos se acercan pidiendo que regrese, no puedo; me levanto lentamente, atientas busco la manija al intentar abrirla no hay fuerza en mi, tus gritos se hacen fuerte, debilidad invade mi cuerpo las rodillas se doblan y sigo sin poder ver nada, tocan el suelo tibio, tu voz se hace lejana, no te escucho mas.

Me encuentro parada en un parque lleno gente, niños juegan con pelotas, algunos padres charlan acerca de sus empleos, algunos otros comen papas y de esas cosas que suelen comer los niños, algunos corren de un lado para otro, algunos otros están en los juegos, al parece busco a alguien entre aquella multitud, me encuentro sola, una niña corre a mi alrededor y una voz me habla con preocupación, no logro encontrar a quien me habla, la desesperación me invade, tanta gente y no te puedo encontrar, comienzo a correr y aun no te encuentro, busco en cada rostro tu mirada, esa voz que me pide que no me vaya. Me encuentro en caos, algunas personas dejan de comer, dejan sus interesantes charlas, para preguntarme qué es lo que sucede, para darme palabras de aliento diciendo que todo estará bien. Me encuentro en descontrol, fuera del juego, corro hacia la calle, cruzo y un auto se detiene violentamente; por primera vez no recibo insultos. Estas ahí, sentado en la calle con un cigarro en la mano derecha, me encuentro repleta de paz.

Estamos sentados en aquel parque al que solíamos ir, recuerdo en sueños lo verde del pasto, lo luminoso que era, lo inmenso de los arboles, pero hay una diferencia no veo tu cara solo siento que estas cerca, cierro y abro para poder dar crédito a lo que veo, no hay mas, tu no estas, ni siquiera te puedo sentir, un golpe en la espalda, duele; otro mas pero ahora es en el abdomen.

Estoy esperando el camión en la calle de Lerdo, llevo más de 15 minutos esperando y llego a la conclusión de que la espera no puede continuar, después de 5 segundos de debate interno decidimos continuar caminando, un cigarrillo. Veo a lo lejos a una persona que se acerca con cierta frialdad, enojo tal vez, me aterrorizo al ver que se acerca lentamente me toma de la mano, mi cara se paraliza, no puedo pensar, no hay ideas en mi. ¿Qué hago?, el miedo me come, me desvanezco, una vez más.

Abro los ojos y estas ahí, puedo verte te encontré, en tu voz se siente una clase de alivio.Razono cada palabra una y otra vez, no encuentro nada por lo que pude haber regresado.